Sea Of Love

Ayer fue San Valentin; nada relevante: el mismo entorno, las mismas cosas, las mismas personas; ideas sin destino que trascienden por ninguna parte. He olvidado escuchar mi canción preferida.... Me gusta bailar, me recuerda que hay esperanza de nuevas cosas y que mi tiempo en soledad va a terminar, todas ellas se terminaran, incluso el amor, si; el amor, ese que desde hace tiempo lo estoy buscando y que por alguna razón me ignora, me tiene perdida entre millones de ilusiones que corren por ahí, entre la lluvia y su neblina azul, entre las calles de una triste ciudad en la que hombres perdidos divagan y se comen mutuamente; malditos, no saben vivir... bueno, me pregunto ¿quizás yo se vivir? porque no lo ciento, no ciento desde hace un tiempo, me he hundido en tanta arrogancia de mierda. No estoy donde quisiera estar: lejos, tan lejos cómo sea posible; libre para poder vagar pos selvas lejanas; libre para poder ser lo que soy... Amar de tal manera que mi propia esencia pueda volar, qué mi cuerpo se sienta uno con el todo y qué mi alma llegue a ser feliz, para poder gritar: ¡hola San Valentin! 

Una chica sin suerte.

Yo tenia un texto, se que lo tenia, pero lo he perdido, creo que lo dejé olvidado en mi buró, o quisas fue en el sanitario del teatro al que fui la noche anterior. No lo se... Me estoy esforzando para recordar que falló en mi memoria para hacerme cometer tan gran error, pero siento que no esta funcionando, creo que dejó de funcionar hace mucho tiempo; mucho antes de que yo cruzara por ese túnel que me vio nacer, mucho antes de saber que existía, mucho antes de mi propia muerte... 

Una vez un viejo mulato me dijo que no debo preocuparme del extraño frió que produce un olvido, qué tan solo son ideas que regresan a su lugar de origen, ya que se sienten solas al estar tanto tiempo reprimidas en nuestro corazón. Al principio no le creí, dije "este hombre esta loco"   Pero pienso, ¿quien soy yo para juzgar la cordura de este individuo si nunca he puesto en tela de juicio mi propio razonamiento? ...Mi razonamiento es terriblemente engañoso, un ser hecho humo que atormenta mis pasiones, que las despedaza ante tanto camino solitario y las devora cual Cronos en plena cólera; quien fuera Romántico para vetar tal angustia perdida en tanto siglo, en tanto dolor, en tanto olvido. Yo digo que quizás sea cuestión de suerte... Esperen, ni si quiera se que es la suerte. Muchos hablan de ella cómo si perteneciera a su propia alma, o algo así. Quisiera saber que es "tener suerte", desde siempre me lo he preguntado, incluso me han dicho lo "in fortuna" que soy. ¿A quién debo creerle? No se si al viento que habla cada noche para decirme que no tema, o al razonamiento inmundo qué más que atormentarme logra saciar mi angustia ante tanta existencia incierta... (Grito) ¡Qué importa si no se que es la suerte! o más aun, qué importa tan nauseabunda palabra; no me importa, nunca me ha importado ni me importara, ya que pienso dejar que mi vida vague en los acordes de de la  locura y así se pierda para poder en un futuro encontrarse con lo que realmente soy. 

...He aquí la incógnita de la chica sin suerte, las de las alas vendadas y el corazón atormentado.